Amanecer, atardecer, amanecer, atardecer..., para mi son lo mismo, cuando amanece el impulso principal del día es bajar las escaleras directo a la cocina, ummm el rico aroma del café preparado y esperando por el primer gran sorbo, esto es para mi el equivalente a levantarte con el pie correcto cada mañana, a quien le importa con que pie te levantes mientras te levantes, hay café!, eso es lo importante. El CAFÉ DE LA MAÑANA es el momento idóneo para organizar las ideas y la agenda, repasar las estrategias de conquista para el nuevo día, ah sí! y revisar la "TO DO List" porque asumo a que todos tenemos y debemos tener una.
Luego de años y años de insomnio, durante mi infancia logre vivir durmiendo poco, sólo recuerdo haber tenido problemas para dormir y uno que otro problema estomacal, así que esto era la causa de terribles preocupaciones para mis padres, me dormía muy tarde y me levantaba muy temprano, prácticamente dormía 5 horas como mucho. A los 14 tuve episodios de insomnio crónico, es decir, pasaba de dos a tres días sin dormir, y allí fue cuando todo se fue por el caño, visite varios médicos e inclusive psicólogos; los médicos me pusieron las drogas en bandeja de plata, y admito que no era una opción atractiva para mi, ya que siempre le he metido a los deportes, pero era una solución efectiva que me permitía llevar una vida "normal" (normalmente dopada y lenta). Fueron muchos los efectos secundarios, sobre todo a nivel alimenticio, pero fue el psicólogo de mi escuela quien dio con algo mas fácil de asimilar, me dijo que mi cerebro simplemente no se cansaba y se extraoxigenaba con mis actividades físicas (común en deportistas), y que para dormir debía cansarlo completamente, su solución fue que leyera mucho en las noches, y que realizara muchos SUDOKUS para poder alcanzar el sueño profundo con mayor rapidez. ERUREKA! podía dormir sin tomar drogas, métodos de relajación, música suave y miles de sudokus me salvaron la adolescencia.
Para cuando crecí, entre la universidad, el trabajo y los deportes, aprendí a llevar una vida llena de actividades y una full agenda, ah si! porsupuesto! y mucho CAFÉ!!... Mi cerebro se cansaba por sí solo, así que eran muy pocas las noches en las que Morfeo (dios griego del sueño) no me visitara temprano, y esto se debió a una costumbre que copié de papá, tomar CAFÉ DE NOCHE, el decía que lo hacia dormir mejor, calmar el ajetreado día, calmar las ideas en la cabeza y relajar todo el cuerpo. Así que empecé a tomar café en las noches.
CAFÉ NOCTURNO, es el nombre de este blog porque es la hora en la que me dispondré a escribirle los días de la semana en que Morféo se vaya de parranda y se olvide de su trabajo. Tomando el cafecito nocturno es mi tiempo para ordenar ideas, repasar aprendizajes, revisar las listas y los "post it notes" de la pared, leer un libro y de vez en cuando imaginar un mejor final o escribir uno nuevo en mi cabeza. Sea lo que sea que me den ganas de escribir estoy segura de que será mas feliz afuera de mi cabeza que dentro de ella.
Feliz #CoffeeTime!!
12:16 am
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